Los intendentes de la primera sección electoral se sienten “afuera” del gobierno de la Provincia de Buenos Aires aunque desde La Plata no toman nota de estos múltiples reclamos al sostener que “en los últimos años no hubo intendentes en ningún puesto de gestión, ni con Scioli (Daniel) ni con Vidal (María Eugenia).
Alejandro Granados, de Ezeiza, entienden, es la excepción.
La relación con la mayoría no es la mejor. Pero en los últimos tiempos parece haberse agravado. Quien lo reconoce en la intimidad es el intendente de José C. Paz, Mario Ishii, un auténtico referente regional e invicto desde que se presentó hace veinte años en su primer elección.
Ishii fue el que ayudó a mantener y proyectar la Universidad Nacional de José C. Paz. Esa decisión fue aprovechada por Axel Kicilof, quien se nutrió de esa casa de altos estudios de buena parte de su equipo de gobierno.
Si bien no lo había hablado, al inicio de año se especuló y hasta se anunció el nombramiento del intendente de José C. Paz como nuevo presidente del Cinturón Ecológico Ambiental Sociedad del Estado, CEAMSE, cuyo territorio mayoritario está en la región norte del Conurbano.
Sin embargo, ese nombramiento, que le daba mayor libertad política a uno de los pilares del kirchnerismo provincial, nunca se confirmó. Y ahora se conoció el nombramiento de Mónica Capellini, de estrecha confianza de Jorge Ferraresi, intendente de Avellaneda, del Sur del conurbano.
El Norte y parte del Oeste componen la Primera sección electoral. El Sur y el Oeste de La Matanza, a la Tercera. Parece que Kicilof los prefiere, al igual que el kirchnerismo más duro.
Otro que también pudo ubicar a personas de su confianza fue Martín Insaurralde. El jefe comunal de Lomas de Zamora además de haber conseguido que Federico Otermin presida la Cámara de Diputados provincial, logró, no con poco esfuerzo, dejar a uno de los propios también al mando del Instituto de Lotería y Casinos.
Demás está decirlo que los tres lugares, CEAMSE, Presidencia de Diputados y Lotería son organismos con mucha disposición económica.
¿Y la primera sección?… Nada. Para los intendentes no cuentan Eduardo Santín, un radical K sin territorio, oriundo de Moreno, que nadie puede facturar, ni los ministros surgidos desde la UNPAZ, que sólo le responden al gobernador.
La otra Cámara legislativa, el Senado, es presidida por la matancera Verónica Maggario, por su carácter de vicegobernadora.
“No sean tan malos ni mal pensados… La primera tiene la ministra de Gobierno”, Teresa García, expuso un funcionario que “vive” en 6 entre 51 y 53. Irónico, bien sabe que García es antes que nada una persona de máxima confianza de Cristina Fernández de Kirchner, la veedora del gobernador.
En medio de esta puja, llama la atención la demora que se observa en la aprobación de varios emprendimientos reclamados por los intendentes de la región Norte, algunos de ellos vinculados con la industria inmobiliaria y portuaria. Parece que no fue casual la fulminante acusación de Kicilof sobre la virtual ocupación de los terrenos de los barrios privados que no pagan los impuestos, según denunció.
